viernes, 29 de octubre de 2010

Tal vez desde mi pecho...


tal vez, desde mi pecho el valor se apage,
pero nunca acabara el amor, de donde arde,
aunque impetrar con clemencia demande
que el olvido entre ambos, nunca, nos acabe.

aunque de tus ojos males manes,
lo recibira mi ser sin pensar;
para que asi todo acabe y ames
en verdad]

más el sol que arde sin cesar,
no, une en una espiral de pasiones,
porque en espiral no se puede amar.

a si fue nuestra ilusión, rebelde
con sentimietos, pero todo fue endeble,
más, ahora se queda en ilusa tarde,
que con tormenta, este poema se pierde.